sábado, 10 de diciembre de 2022

El Músculo más poderoso (Santiago 3:1-12)

A modo general, el cuerpo humano está compuesto básicamente por tejido muscular, adiposo, óseo, piel, órganos y vísceras. De esto, el mayor % lo lleva el tejido muscular siendo alrededor de un 40%, es decir por cada kilo corporal, tenemos 400 gramos de músculo.

Como bien es sabido, los músculos cumplen muchas funciones, entre ellas dar movilidad al esqueleto, ayuda a la estabilidad y mantiene la forma corporal.

Increíblemente de todos los músculos del cuerpo, existe un pequeño grupo que en su relación tamaño/fuerza sobresale de todos los demás, este es la LENGUA (contiene 9 músculos), cumpliendo funciones que son determinantes para nuestro diario vivir como la Masticación, la Deglución, el Sentido del Gusto y el LENGUAJE.

 

¿Pero qué pasa cuando este pequeño músculo ostenta de su poder y presume de su poderío?

¿Como puede ser que un pequeño grupo de palabras hiladas estratégicamente puedan dañar a una persona hasta el punto del suicidio?

¿O simplemente cambiar el destino de una ciudad, región o país?

 

Analicemos detalladamente que dice la Escritura acerca de este pequeño órgano.

 

Santiago 3:1-12 RV60

Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación. 2 Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo. 3 He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo. 4 Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere. 5 Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego! 6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno. 7 Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana; 8 pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal. 9 Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios. 10 De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.

 

Santiago parte el capítulo 3 dirigiéndose a la iglesia, esto lo corroboramos al leer las primeras dos palabras cuando en su escrito leemos “Hermanos míos”, también leemos una ordenanza escrita “no os hagáis maestros muchos de vosotros” al parecer había un problema que estaba relacionado a aquellos que querían enseñar como maestros en medio de la congregación. No se trata en ninguna forma de limitar a aquellos que son levantados por el Señor con el don de la enseñanza, sino más bien poner un freno a aquellos que desean por ambición personal y económica ser supuestos maestros sin tener un llamado de parte del Señor, lo que ataca Santiago en forma directa con esta ordenanza es el pecado de AMBICION, ambición de poder, ambición de reconocimiento, ambición de pulpito…

A esto le sigue la causa por la cual deberían desistir todos aquellos que utilizan su propio lenguaje para poder acaparar miradas “sabiendo que recibiremos mayor condenación”, al parecer se les olvida una cosa, y es que debemos dar cuenta en forma individual ante el trono de la Gracia…

Mateo 12:36 RV60 Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.

Romanos 14:10-12 RV60 10 Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. 11 Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda lengua confesará a Dios. 12 De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí.

Todos los que hoy están enseñando en medio de la iglesia, dice la Escritura que recibiremos MAYOR CONDENACION, y esto debido a que somos responsables de lo que enseñamos y predicamos, porque somos los formadores en cuanto a la palabra que sale de nuestra boca…

He aquí la gravedad de este asunto y no puedo dejar pasar este momento sin que se los diga, es una falta grave ante el Señor ejercer un don que el mismo Señor no te ha entregado, esto es pecado ante los ojos de Dios, peor aún, pararse en frente de la iglesia sin tener la preparación necesaria, y rellenando con explicaciones que no tienen ni pie ni cabeza, y si quiere agregar algo más, pararse en frente de la iglesia haciendose el chistoso, contando alguna anécdota o chistecito como para que la reunión no sea tan aburrida. Hermanos, usted no viene aquí para ser entretenido por un payaso que se para con micrófono, usted está aquí por el EVANGELIO y es a través de este Evangelio que usted será convicto de PECADO, JUSTICIA y JUICIO, esta es la única manera de que el Espíritu Santo pueda traer arrepentimiento sobre su vida, EVANGELIO y no chistes que son balbuceados por un seudo payaso para entretener a algunos…

Quienes enseñamos, seremos juzgados con severidad, por cada una de las palabras que hemos entregado en frente de la congregación, por eso quien esté detrás de un pulpito debe estar convicto del llamado que Dios ha puesto en su vida, de lo contrario, mejor no lo haga…por otro lado, no solamente daremos cuenta por nuestras palabras, también daremos cuenta por no cumplir la palabra que hemos compartido, debemos ser ejemplos de conducta nos vean o no…

El aposto Pablo escribió en la 1ra carta a Timoteo lo siguiente:

1 Timoteo 4:12 RV60 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.

 

Santiago 3:2 “Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.”

Hermanos, no cabe duda de que lo más difícil para el hombre tiene que ver con la capacidad de FRENAR la LENGUA, quien logra hacer esto, es considerado como un hombre maduro, que tiene la voluntad suficiente para poder controlar no solo su lengua, sino también todo su cuerpo.

 

Santiago 3:3-4 “He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo. 4 Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere.

 

Para los que han andado a caballo, se han dado cuenta que el fierro que llevan en el hocico es muy pequeño en cuanto al tamaño del caballo, pero por muy pequeño que sea, controla a todo el animal, así mismo es la lengua, un órgano diminuto, capaz de controlar todo lo que hablemos y cuando las palabras fueron soltadas, créame es imposible que estas pueden devolverse a usted…

Otro claro ejemplo que Santiago ilustra en el capitulo 3, tiene que ver con los barcos, estructuras que son inmensamente grandes y poderosas, pero dentro de ellos existe un pequeño timón, capaz de controlar el barco hasta en las tormentas más duras por la cual atraviesa…

 

Santiago 3:5 “Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!

Al igual que el timón y el estribo, la lengua es un miembro muy pequeño, que es capaz de ejercer dominio sobre una persona, esta es controlada por 9 músculos y se jacta de grandes cosas, pero debemos tener 1 cosa clara, ya que el verbo utilizado para jactarse conlleva el sentido de levantar el cuello, es decir ARROGANCIA, es la lengua que evidenciara lo arrogante que un hombre o mujer puedan ser.

La Arrogancia está definida como “Un sentimiento de superioridad sobre otros, y está basada en la falsa creencia que merece mayores privilegios que el resto. Además, es un defecto del carácter que consiste en ser Altaneros, presuntuosos, prepotentes o soberbios.

La arrogancia, por ejemplo, se manifiesta cuando alguien no deja que los demás expresen su opinión en una reunión, sino que siempre quiere imponer su punto de vista

 

Hermanos, una de las cosas que condena la Biblia es la Arrogancia

Proverbios 16:5 RV60 “Abominación es a Jehová todo altivo de corazón; Ciertamente no quedará impune.”

Proverbios 6:16-19 RV60 “16 Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma: 17 Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente, 18 El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal, 19 El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos.”

Este órgano tan pequeño, puede encender un gran incendio, piense en aquella ocasión que respondió mal a alguien con alguna palabra subida de tono o hiriente, que paso en esa ocasión ¿Termino de hablar y no paso nada? o la cosa comenzó a calentarse a tal punto que terminaron enojados, sin hablar y esto lo único que produce son consecuencias graves que traen lágrimas, soledad y tiempo perdido que es imposible recuperar…

Santiago 3:6 “Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.

No solamente es considerada como un fuego, la lengua hermanos podría llegar a ser un instrumento que nos lleve a los malos deseos y podría satisfacer hasta las pasiones más bajas, el modo pecaminoso de hablar produce consecuencias que son irreparables, tal cual lo produce el fuego en los bosques que se queman, son hectáreas completas devastadas por las llamas y cuesta años recuperar lo perdido, así mismo la lengua como una pequeña llama puede destruir lo que se ha construido por años en una familia.

Salmos 120:3 NTV “¡Ay, lengua engañosa! ¿Qué hará Dios contigo? ¿Cómo aumentará tu castigo?”

Por otro lado, dice la Escritura que la lengua es considerada un mundo de maldad, dicho de otra forma, la lengua está calificada para orientar el pensamiento hacia el mal, y más encima puede llegar a defender cualquier tipo de acción pecaminosa, tal como lo hace un abogado defendiendo a un asesino que es culpable.

Por eso la lengua se sienta sobre un trono por encima de los demás miembros del cuerpo, porque la misma ejerce dominio sobre todo aquel que no es capaz de poner freno a sus palabras. Contamina, ensucia y mancha la vida de la persona, es considerada por el mismo Señor Jesús como agente contaminante

Mateo 15:11 NTV “Lo que entra por la boca no es lo que los contamina; ustedes se contaminan por las palabras que salen de la boca.”

Este agente contaminante es altamente nocivo en la vida de las personas, ya que no sólo se contamina quien emite las palabras, también se contamina aquel que las recibe, causando heridas profundas en el alma de la persona, muchas veces llevándolos a la destrucción misma.

Lo grave de todo esto radica en que la Escritura especifica claramente que el fuego que enciende la lengua proviene del infierno y quien habla mal y se deja dominar por la lengua, actúa bajo la influencia de satanás.

 

Santiago3:7-8 “Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana; 8 pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal.

Muchos de nosotros hemos ido en alguna oportunidad al circo y una de las cosas que siempre me ha llamado la atención que el rey de la selva, el magnifico León se doblegue ante un insignificante hombre…o como puede ser que dominemos a una ballena, montando sobre ella como si fuera un caballo acuático…que gran hazaña hemos conseguido…

Pero hoy el Señor a través de esta palabra nos dice que hemos logrado domar a muchas de las grandes criaturas que Dios creo, pero algo tan insignificante y pequeño no lo hemos podido domar y Santiago pone dos calificativos al modo de hablar:

1.      No puede ser refrenado (maligna e incansable NTV)

Lleva la idea de algo que es incontrolable, que se escurre con facilidad, que es inquietante, donde toma el sentido de oponerse a todo lo que es bueno

2.      Llena de veneno mortal

El Señor a través de las palabras de Pablo examina al hombre en el libro de Romanos capítulo 3 y entre los versículos 13-15 dice “Romanos 3:13-14 NTV 13 Lo que hablan es repugnante, como el mal olor de una tumba abierta. Su lengua está llena de mentiras. Veneno de serpientes gotea de sus labios. 14 Su boca está llena de maldición y amargura.

Hermano, hoy te pregunto que hay en tu corazón, por que de la abundancia de el hablara tu boca, comencemos a sujetar nuestras palabras y pensamientos, no sea que por esto comiences a endurecer tu corazón a causa de la arrogancia de tus propias palabras e ideas que son contrarias al nuevo nacimiento que se nos ha otorgado por Gracia.

 

Santiago 3:9-10 “9 Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios. 10 De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.

Santiago termina este párrafo haciendo un contraste entre las dos formas de hablar que puede tener una persona:

1.      Con ella bendecimos al Dios y Padre

Lo primero que resalta es que la lengua es un instrumento de bendición y alabanza a nuestro Dios y Padre, dicho de otra forma, es glorificar a Dios con alabanzas que exaltan, honran, bendicen el nombre del Señor. También reconocen el señorío de Cristo sobre sus vidas, donde pasaron de ser esclavos de satanás, a siervos del Dios altísimo, nacidos en Cristo para buenas obras. Esto va ligado hermanos de nuestra absoluta y total dependencia al Señor.

2.      Con ella maldecimos a los hombres

Inmediatamente nos encontramos con la mayor de las dicotomías asociadas a uno de nuestros miembros del cuerpo, por un lado, exaltamos a Dios por su creación y por lo que ha hecho en nosotros, pero por otro, MALDECIMOS, hablando mal de otras personas, deseando muchas veces a través de pensamientos y palabras el peor de los males. Lo grave de todo esto, es que maldecimos a aquellos que están hechos a la imagen de Dios

Génesis 9:6 NTV Si alguien quita una vida humana, la vida de esa persona también será quitada por manos humanas. Pues Dios hizo a los seres humanos a su propia imagen.

El que maldice, en su interior no cabe duda de que tiene una profunda raíz de amargura, que esta arraigada dentro de si y que producirá en el o ella un amargor que no lo dejará tranquilo, la amargura no es una simple situación anímica, es más bien un pecado que se revela en contra de lo que Dios ha establecido en su palabra y cuando ve consumado o realizado su deseo de mal, se sentirá feliz por un breve instante, hasta que la raíz de amargura comience a trabajar nuevamente, alimentándose de la falta de comunión intima con el Señor…por eso es tan importante hermanos que todos los días de nuestra vida examinemos nuestro corazón para que estemos en paz con Dios…

Para que usted maldiga a otro, no es necesario que pronuncie una frase como “te maldigo por lo que eres…”, basta que usted hable mal de esa persona, poniendo en alto sus debilidades, desprestigiando a esa persona, y esto lo puede hacer de distintas formas, por ejemplo, un escrito en las redes sociales, una imagen alusiva al error cometido, etc.  es por esto por lo que todo aquel que maldice a otro siempre buscará la forma de exponerlo para desprestigiar la vida de esa persona delante de otros…mirado desde este punto de vista hermanos, todo aquel que se deja dominar por su deseo de venganza, y su deseo de desprestigio, es un instrumento en manos de satanás.

 

Si usted examina su vida delante del Señor ¿Puede decir con toda propiedad que está libre de este pecado?

Por qué déjeme decirle esto, la urgencia de arrepentirnos de esto radica en que muchas veces hemos hablado, pensado y escrito de un Redimido de Cristo, de aquel que ha sido Regenerado por el Señor y que hoy es una nueva criatura en Cristo Jesús, y créame que Dios no dejará impune a aquel que comete este tipo de pecado sobre aquel que ha sido adoptado por Dios y que tiene todos los privilegios de hijo…

Quiero terminar con esto, recordando las palabras del apóstol Pablo:

1 Corintios 11:27-30 NTV “27 Por lo tanto, cualquiera que coma este pan o beba de esta copa del Señor en forma indigna es culpable de pecar contra el cuerpo y la sangre del Señor. 28 Por esta razón, cada uno debería examinarse a sí mismo antes de comer el pan y beber de la copa. 29 Pues, si alguno come el pan y bebe de la copa sin honrar el cuerpo de Cristo, come y bebe el juicio de Dios sobre sí mismo. 30 Esa es la razón por la que muchos de ustedes son débiles y están enfermos y algunos incluso han muerto.”

Hermano, quizás hoy eres una persona débil espiritualmente hablando, y quizás estás padeciendo alguna enfermedad que te tiene complicado, por el sólo hecho de no haber discernido correctamente el cuerpo de Cristo, por no pedir perdón por aquellas palabras que dijiste en un mal rato de enojo, donde te has dejado dominar por tus pensamientos y las palabras de maldición brotaron como la maleza en tu jardín, si es así te invito a que en la intimidad donde estás puedas pedirle perdón al Señor, rogando que el tenga misericordia de ti, suplicando incluso con lagrimas que quite de ti toda enfermedad y debilidad que este pecado a acarreado sobre tu vida…si es necesario hermano, y debes pedir perdón a uno de tus hermanos, sal de tu asiento y en el nombre del Señor que sea restaurado el vinculo perfecto en la unión con Cristo Jesús…

Que el Señor les bendiga

Entrada destacada

FE

Hebreos 11:6 RV60 “ Pero sin fe es imposible agradar a Dios ; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es gala...